Escriben: Ingrid Urrutia, Alternativa Estatal CABA y Pablo Lopardo, Alternativa Estatal de Moreno
Los dirigentes de ATE hablaban de autonomía y la libertad sindical, pero nunca llegaron a romper con el viejo modelo sindical ni a aportar a una alternativa independiente para les trabajadores. Como vimos, siempre optaron por variantes maquilladas de las viejas estructuras partidarias del régimen y del peronismo y su modelo se va pareciendo cada vez más a UPCN.
En 2019 con el argumento de que se vaya Macri, todas las verdes se integraron a la coalición del gobierno, del Frente de Todos. Los lazos orgánicos incluyen cargos en ministerios y funcionarios de distinta jerarquía: Claudio Lozano, actual director del Banco de la Nación Argentina, De Gennaro, De Isassi y otros dirigentes vienen integrando listas del FdT. La fracción Verde-Blanca, tiene una asimilación mayor aún al gobierno. Ni un vestigio independencia política.
Necesitamos un cambio de rumbo en ATE. La crisis histórica de esta corriente y sus variantes verdes en todo el país no puede arrastrar a nuestro sindicato a la parálisis o a transformarse en la farsa de UPCN.
La tarea y el desafío que nos planteamos desde Alternativa Estatal es su recuperación, creemos que es urgente y se lo queremos plantear a todos los luchadores honestos que siguen levantando la bandera de independencia de gobiernos y patrones y la defensa de la asamblea como órgano supremo de debate y resolución de todas las acciones de lucha.
Necesitamos democratizar el sindicato, terminar con el verticalismo cada vez mayor donde mandan los CDP y el CDN y no las asambleas. Basta de dirigentes atornillados a los sillones.
Comenzó una rebelión desde las bases
La crisis de las Verdes no es solo un proceso de crisis en el aparato. Tiene su origen en la bronca y la decepción de miles de trabajadores y activistas que se va transformando en lucha. Es un proceso que se va gestando. Todavía no se generalizó. Pero allí donde la bronca dio paso a la movilización, en los sectores donde hubo más lucha como en salud, desbordó a las conducciones y se autoorganizó, contra la Verde en Río Negro y contra la Verde Blanca en Neuquén. Una tendencia que pone nerviosa a esta dirigencia que se está sacando la careta.
Todavía no hay un proceso de movilización entre les estatales administrativos. Sin embargo, la bronca crece y se refleja en la coordinación de las Interjuntas principalmente en CABA y también en Provincia de Bs. As., que este año dieron pasos en la coordinación ante la paritaria nacional. Tenemos que fortalecer esos espacios de unidad para defender la calle y seguir exigiendo al gobierno y a la burocracia. Consolidando y extendiendo la unidad de la izquierda clasista y antiburocrática en la Multicolor. Preparándonos para la pelea por nuevos delegados y disputar juntas internas. Porque la marea está creciendo.
Para impulsar esta unidad, necesitamos hacer grande a nuestra agrupación Alternativa Estatal que integra ANCLA/MST.
Porque el modelo sindical que terminó en la asimilación al Estado-patrón no va más. Frente a la política de ajuste del gobierno de Alberto Fernández, de priorizar los intereses y el pago al FMI sólo puede esperarse más precarización para les estatales y salarios de pobreza. El centro de la política es la unidad de los sectores que en primer lugar rechazan el ajuste del gobierno y repudian el accionar de la conducción del sindicato.
Nosotres proponemos un modelo donde haya proporcionalidad para romper con la vieja cultura de pensamiento único e integrar a todas las corrientes de opinión a las diferentes conducciones. Eso en ATE no existe, el sistema electoral de mayoría simple donde «el que gana conduce y el que pierde acompaña» excluye las opiniones de la base. Deben fortalecerse el funcionamiento de plenarios de delegados y asambleas y consultas periódicas a la base es imprescindible, en la actualidad los plenarios convocados además de que no se vota se convocan sin propuestas de acción.
Creemos que ese es un primer paso en la defensa de la pluralidad, que es real en nuestro sector. Por otro lado, planteamos la proporcionalidad de género según la base de afiliación para promover y garantizar la representación igualitaria en el ámbito sindical. La cultura patriarcal hegemónica en los sindicatos requiere de medidas que fortalezcan la participación real porque sigue operando el “efecto de techo de cristal” en los espacios de decisión y poder. Las mujeres y disidencias no están sólo para discutir de género ni completar listas.
Para poner en pie este modelo democrático, independiente el estado y los partidos patronales, combativo, sin privilegios y feminista, creemos que la defensa de la unidad de los que luchan y la izquierda es clave. Para recuperar ATE para les trabajadores. Te incitamos a sumarte a Alternativa Estatal – MST.