Santa Cuz ha subido la apuesta en la oleada criminalizadora de las luchas que recorre diferentes puntos del país. Chubut, Salta, Jujuy, Córdoba, CABA son un anticipo de lo que se viene. Con persecuciones, aprietes y hasta legislaciones, preparan un marco para la represión que, gane quien gane, necesitan para sus planes de profundizar el ajuste.
Escribe: Emilio Polliak
La provincia de Santa Cruz, gobernada por Alicia Kirchner, acaba de producir un ataque violento contra docentes y trabajadores que reclamaban por sus salarios. Por órdenes directas de la gobernadora y también de la vicepresidenta Cristina Kirchner, acusan a tres trabajadores docentes de “intento de femicidio” y a una trabajadora estatal de “intento de homicidio”.
Esta brutalidad, que no tiene nada que envidiarle al gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, en su ataque a los trabajadores de su provincia, se remite a un reclamo salarial en el año 2017, en medio de un largo conflicto de los trabajadores docentes y estatales, cuando la entonces presidenta CFK visitó la provincia y estaba reunida con la gobernadora en su residencia. Ese día, una movilización espontánea de trabajadores ocupó las calles y parte de los jardines de la residencia, exigiendo soluciones a sus reclamos. La única respuesta fue una brutal represión con gases y balas de goma. A partir de ahí, la justicia de Santa Cruz, totalmente cómplice del poder provincial, armó una causa contra los compañeros Claudio Wasquín, Diego Barrionuevo y Juan Manuel Valentín y contra la compañera Gabriela Ance. Barrionuevo era en ese momento Secretario Adjunto del gremio docente ADOSAC, Wasquín y Valentín dirigentes de la CTA Santa Cruz y referentes del MST y el PO respectivamente. Ance era referente de la oposición de ATE y militante del PO.
Esta justicia controlada por el poder acaba de cambiar la carátula de la causa armada, pasándola de “violación de domicilio” a “intento de femicidio y de homicidio”, volviéndola a la instancia de instrucción, con el objetivo de solicitar penas más duras para los compañeros y abrir la posibilidad de dictarles la prisión preventiva. Un verdadero ataque a las libertades y derechos democráticos que pisotea esta gobernadora. Además bastardea la lucha histórica del movimiento de mujeres, apelando a la figura de “femicidio”, hecho que fue repudiado por la Mesa Feminista Independiente de Rìo Gallegos y otras organizaciones feministas. Todo esto en medio de una nueva lucha salarial docente que lleva seis meses y cuya única respuesta por parte de Alicia Kirchner es represión y criminalizar la protesta social, con su “Partido Judicial” nuevamente actuando a través de una medida cautelar que anula el derecho a huelga.
Hay que rechazar y enfrentar este ataque de Alicia Kirchner a los trabajadores docentes y estatales. Hay que rodear de solidaridad a los compañeros Wasquín, Barrionuevo, Valentín y Ance. Desde Adosac se convoca a una jornada frente al Tribunal Superior de Justicia el 5 de agosto abierto a todas las organizaciones. Hay que apoyar esta convocatoria desde todos los sindicatos docentes del país, desde los sindicatos combativos, juntas internas y cuerpos de delegados, de organizaciones de derechos humanos, de todas y todos los que dicen defender las libertades y derechos democráticos, no podemos dejar pasar este injusto ataque a nuestros compañeros. Desde el MST en el FIT Unidad proponemos una gran campaña nacional de solidaridad que impida que el gobierno kirchnerista de Santa Cruz meta presos a los compañeros. Absolución inmediata de Wasquín, Barrionuevo, Valentín y Ance.