El pasado domingo 16 de julio se llevaron adelante las elecciones PASO provinciales de Santa Fe, el tercer distrito electoral más importante del país.
Escribe: Gastón Baldomir
Dos hechos centrales marcaron estas elecciones: el PJ sufrió una dura derrota y la abstención fue protagonista; la lista Unir la Izquierda, integrada por el MST y el PO, se impuso de forma cntundente en la interna del Frente de Izquierda Unidad en todo el territorio provincial.
Contundente derrota del peronismo
El peronismo sufrió una dura derrota tras volver a ser gobierno luego de doce años de ausencia en la casa gris. El dato clave es que tras sesenta años un referente radical tiene enormes chances de ser gobernador. Se trata de Maximiliano Pullaro, ex ministro de seguridad durante el gobierno de Miguel Lifschitz, quien se impuso sobre Carolina Losada en las internas de Unidos para Cambiar Santa Fe (UCR-PRO-PS). De conjunto el frente opositor obtuvo cerca de un millón de votos.
De esta forma, el frente opositor marco una diferencia de 530 mil votos sobre los obtenidos de forma conjunta en la interna de Juntos Avancemos (PJ) en la que resulto victorioso el periodista y actual diputado nacional Marcelo Lewandowski. Los bajos salarios y la falta de inversión en obras en el sector público y en las barriadas populares son algunos de los elementos que han reafirmado el voto castigo al gobierno de Omar Perotti, que se postuló como candidato a diputado, obtuvo 241 mil votos. Una performance muy atrás de los 465 mil obtenidos en las PASO del 2019 cuando se presentó como gobernador para luego resultar invicto en las generales con cerca 750 mil votos.
Además, las elecciones dejaron un dato clave: un alto índice de abstención y voto en blanco-nulo. Los datos de la Junta Electoral Provincial, indican que la participación fue de 1.628.702 votos válidos emitidos en todo el territorio santafesino en la categoría gobernador. Del total, un 7.25% fueron votos en blanco y un 4.87% votos anulados.
Triunfo de «Unir la Izquierda»
A pesar de la alta abstención y el voto en blanco-nulo, el Frente de Izquierda logró conquistar 41 mil votos en la categoría a la gobernación, de los cuales 62.3% los obtuvo la lista Unir la Izquierda (MST-PO) logrando imponerse en los 19 departamentos provinciales por sobre la lista encabezada por Octa-vio Crivaro del PTS. De esta forma, quedó confirmado que la formula de Carla Deiana, dirigente del PO, y el compañero Mauricio Acosta, secretario general de la Junta Interna del SET-107 e integrante del MST, estarán presentes en las generales de septiembre. De conjunto en esta categoría la izquierda se consolidó como cuarta fuerza provincial. Además, logró superar las PASO en otros distritos.
En la categoría de diputados provinciales también hubo triunfo de la lista MST-PO, la lista encabezada por Jimena Sosa, docente y refe-rente provincial del MST y el FIT-U, se impuso por sobre la lista del PTS realizando una performance muy importante en las ciudades de Rosario, Santa Fe, Rafaela y otras.
Luego del triunfo la dirección políti-ca del PTS intentó ocultar su derrota con un análisis muy limitado en su portal web: «A pesar de que el FIT-U no pudo retener la suma de nos votos obtenidos entre el FIT y el MST en las elecciones del 2019 (37 mil votos votos del FIT y 25 votos del MST), superó el piso del 1,5% del padrón», pero omitió que el porcentaje de asistencia en estas últimas elecciones, la participación de votantes a nivel provincial, fue de las más bajas de la historia: la participación efectiva fue del 50% casi 11 puntos por debajo si tomamos la del 2019.
Cuestión que nos lleva a preguntarnos teniendo presente el contexto: ¿no es un logro político que el FITU se haya metido en las generales en la categoría a gobernación y otras?, ¿acaso no es valioso que en la categoría a diputados, la más compleja, el FITU haya obtenido cerca del 1,5% de los votos?, ¿desconocemos el 2% de los votos obtenidos en la categoría a senadores en la capital provincial?, ¿qué lugar le damos a los números obtenidos en el cordón industrial donde en algunas localidades no logramos pasar por menos de 30 votos? Son preguntas que una dirección revolucionaria debería plantearse, ocultarlos nos llevara al estancamiento. A no ser que se oculten los interrogantes para tergiversar la realidad.
La única explicación que tiene el análisis equivocado del PTS, es que pretende ocultar la derrota aplastante de Octavio Crivaro, su principal figura y referencia electoral de la izquierda en los últimos 12 años. Pero los hechos son los hechos y no se puede tapar el sol con un dedo. Lo que se ha producido en las elecciones provinciales de este 16 de julio es que han cambiado las referencias de la izquierda y se ha roto la aspiración hegemónica y antidemo-crática del PTS.
Tanto es así que, en la categoría provincial de diputados, Unir la Izquierda obtuvo el triunfo igualmente que, en Rosario, en donde perdió el bastión del PTS a manos de la dirigente del MST Jimena Sosa. Es decir, se ha impuesto la necesidad de otro modelo de Frente de Izquierda, el que propusimos en común entre el MST y el PO en el plenario nacional de los luchadores y la izquierda realizado hace unas semanas en la Plaza Congreso.
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