¿Grieta? Aquí no hay “grieta” sino que todos ajustan por igual. O disputan por ver quién lo hace más. Alarma el escandaloso “aumento” del 5% de Morales y la UCR-Cambiemos en Jujuy. Pero Alicia Kirchner y el PJ en Santa Cruz no se quedan atrás. No sólo no ofrecieron nada, sino que no pagan a tiempo ni están pagando el miserable 8% de aumento que Alicia fijó en 2017.
Suman ocho las provincias con paros y movilización de docentes y estatales. Un tercio del país, pero más del 60% de la docencia y trabajadores del Estado por los distritos que abarca: la Provincia de Buenos Aires, Capital, Santa Fe, Chubut, Santa Cruz, Chaco, Neuquén y Jujuy.
Son gobernadores de Cambiemos, pero también del PJ, el PS y su falso “socialismo” en Santa Fe o el MPN neuquino. ¿Hoja de ruta? El Pacto Fiscal que firmaron a fin del 2017, antes de las fuertes jornadas de diciembre.

Ocho provincias, también universidad y bancarios

A este panorama se suman los docentes universitarios de ambas CONADU, con paro nacional el 10 y 11 de abril. Prevén también una movilización nacional en mayo. Por su lado ATE, siguiendo su lógica de sólo un paro al mes, tiene previsto parar nacionalmente el día 11.
También la Bancaria para el 6 de abril en el país y podrían ir a otras 48hs. Mientras que el Banco Provincia (BAPRO) paró el 3 y 4 contra el vaciamiento, por maniobras para cerrar sucursales y privatizar, además de atacar sus conquistas previsionales.
Macri, los gobernadores y las patronales no parecen amilanarse. Insisten con el ajuste salarial, los recortes y despidos pese a las luchas emblemáticas como el Hospital Posadas, INTI o Río Turbio. También sobreactúan la “dureza” de Vidal al repetir su 15% a la baja, sin indexar y con pagos por “presentismo” y por capacitarse fuera de hora, en el caso de la docencia. Propuestas que violan el estatuto y dejan afuera a jubiladas/os. Similar oferta hizo a los estatales, donde UPCN y la FEGEPPBA pidieron el “presentismo” y podrían firmar, dando la espalda a la aspiración de los estatales.

¿Cómo encarar la pelea?

¿Se puede ganar? ¿No hay cómo torcerles el brazo? ¿Cómo encarar con éxito la pelea salarial? Lo primero es decir que si pueden mostrar esa decisión de seguir con el ajuste es por la burocracia sindical, en particular la CGT, que salió a salvarle la ropa al negrero y cascoteado ministro Triaca, al firmar por el 15% que pedía.
Lejos de organizar la lucha en sus gremios y preparar el paro nacional que hace falta, ante la rebeldía y determinación a luchar expresada en diciembre, con la izquierda en un rol destacado, los Gordos o supuestos “Independientes” de la CGT se pegaron el susto, junto al PRO y los patrones. Pusieron violín en bolsa, luego del triste “paro general” de diciembre, boicotearon la marcha del 21F y estamparon la firma en paritarias por el 15% para garantizar la gobernabilidad del ajuste.
Por eso hay orfandad de dirigencia. Porque si los trabajadores y el pueblo son convocados, como se vio en 2017, en la multitudinaria movilización del 21F, en el “no inicio” de clases en marzo con movilización, en el 8M ante el paro de mujeres y en las marchas del 24M, se colman calles y plazas, se para y se muestra fuerza para seguirla.

La Celeste frenó de entrada

Pero también hay que decirlo, si Macri y los gobernadores pueden plantarse en el 15% es porque la conducción kirchnerista de CTERA y de gremios como SUTEBA o UTE en Capital plancharon el conflicto ni bien arrancó. Levantaron toda medida nacional y frenaron los paros provinciales con un mes de tregua a Vidal, Larreta y Macri.
A esta altura, en 2017 pasaban 17 días de paro en la Provincia, cuatro paros nacionales de 48hs y una multitudinaria Marcha Federal Educativa el 21 y 22 de marzo. Así se abrió un canal de lucha y desborde a la Celeste, sobre todo en SUTEBA. Aprendieron y decidieron frenar de entrada. Una de las mayores entregas en la historia de lucha del gremialismo docente, el que protagoniza un tercio de las huelgas del país, y llega a encabezar el 50% de las medidas con estatales y salud.
Esa energía por recuperar salario y conquistas, junto a defender la escuela pública, es lo que rifa la Celeste. Preocupada más por tallar en la interna del PJ que en torcerle el brazo a Vidal y Macri. No fue casual la presencia de Baradel en la cumbre del PJ a comienzos de año, y explica la aislada y sin preparación medida de la UTE para el 6 en Capital.

No habrá 2019 si dejan pasar el ajuste 2018

Quieren esmerilar al gobierno, antes que darle un golpe que lleve al triunfo. Hasta comparten la idea de que pase el ajuste y el PRO pague el costo por el trabajo sucio. Por eso abonan al lema “hay 2019”, al costo de dejar pasar primero este 2018 de ajuste con la mayor de sus entregas. Si con los paros de 2017, terminamos traicionados al levantar el paro tras la Marcha Federal; hoy nos quieren llevar a una derrota que pueda generar las condiciones para avanzar en cosas no pensadas hasta hoy.
No es la fortaleza macrista que en diciembre se vio mellada. Sino el chaleco de fuerza que ponen al conflicto y hasta nos sacan del ring un mes. Esto permite que “especialistas” educativos como Gustavo Iaies digan que “más allá de algún día de paro, los chicos están en la escuela, la estrategia del paro fue débil y demuestra un cambio de época en nuestra sociedad. Pareciera que el temor a las acciones sindicales ya es cosa del pasado…” (Clarín, 2/04).
O ver como Finocchiaro y Bullrich se pelean por el cargo y quién ajusta más. Como ir por los Institutos de Formación Docente, introducir la meritocracia en las becas Progresar, avanzar contra la paritaria nacional o con el Aprender y el meneado Instituto de Evaluación Educativa para poner la educación al servicio del mercado y la desigualdad salarial y presupuestaria.

Plan de lucha decidido en las bases

En ATE, la Verde tuvo un papel de dividir y alternativizar medidas en diciembre y febrero, en lugar de sumar a la unidad en la acción. Además de pelear lugar por lugar, lo que permite el avance de los despidos y cierres como en la UEP de La Plata o en FANAZUL. Es tiempo de revertir ese rumbo.
En docentes ya es hora que la Celeste de CTERA retome las medidas. Su “Jornada Nacional” del 4 de abril debería haber sido con paro en unidad con los estatales. Única forma de parar el ajuste. Para que las provincias triunfen, CTERA debe llamar a paro nacional por 48hs el 10 y 11 de abril, junto a los universitarios de CONADU. Y junto a ATE que llama a parar el 11 y puede unificar también en 48hs de paro con movilización a Plaza de Mayo junto a salud y judiciales.
La Celeste de CTERA debe poner fecha a la Marcha Federal Educativa que dice “estar construyendo” y nunca convocan. Por paritarias sin techo, contra el 5% o 15% de “aumento”, por un salario inicial de $ 30 mil, presupuesto educativo al 10% del PBI y mayores partidas en salud, desarrollo social, niñez o vivienda, para el pase a planta y poner fin a la precarización en el Estado. Para ganar es necesario la mayor unidad para frenar el ajuste de Macri, Vidal, Larreta, Lifschitz o Alicia K, y seguirla con un plan de lucha decidido en las bases.
Plata hay, el gobierno nacional debe aportar partidas extras, eliminar los subsidios a la enseñanza privada, acabar con los privilegios: en vez de dietazos a senadores que cobran $120 mil, que ganen como una maestra o todxs ganemos como diputado, poner impuestos a las corporaciones y dejar de pagar la deuda a los bonistas. La deuda es con el pueblo. Para potenciar estas peleas se necesita un polo unitario del sindicalismo combativo; unidad necesaria para apoyar las luchas, reclamar con más fuerza el paro nacional y dar pasos hacia la nueva dirección que se necesita. Te invitamos a organizarte en nuestras agrupaciones sindicales de ANCLA para dar juntos esta disputa.

Francisco Torres, Sec. Gremial FND-CTA Alternativa Docente, ANCLA