Scioli y Cristina retomaron sus peleas de cara a la elección legislativa 2013 y por la Rosada en 2015. Al hacerlo, llevan la provincia al rojo, con sus finanzas y prestaciones básicas en crisis. A la falta de respuesta al reclamo salarial de docentes y estatales, se suman la crisis en la salud, educación y los recortes a la asistencia social.
Crisis edilicia, falta de personal e insumos hospitalarios, servicios tercerizados que deben reestatizarse; pago en bonos a los proveedores, recortes a los comedores y transporte escolar; carencias en la justicia, el estado de las rutas que Scioli provincializa, salvando a las concesionarias; crisis ferroviaria ante la que impulsamos un «Tren para todos»; los tarifazos en transporte, peajes y las privatizadas (luz, agua, gas). Expresan un ajuste provincial, junto al «impuesto inflacionario» que Cristina deja correr, licuando los ingresos y presupuestos sociales.
Son parte de un presupuesto 2013 de ajuste que todos votaron: los legisladores sciolistas, los K y los «opositores» de la UCR, PRO o PJ Federal. Pero también del FAP, salvo la diputada de la CTA. Es que donde gobiernan -como Macri, la UCR o el PS de Binner- ajustan igual.
Dicen no tener plata, pero en 2012 creció 31% la recaudación provincial y la AFIP celebra récords históricos en la recaudación nacional. Hay plata, pero la destinan a los ricos, al festival de subsidios privados y a pagar la fraudulenta «deuda pública». Mientras Cristina mantiene los recortes en la coparticipación y en el Fondo del Conurbano.
Debemos apoyar la lucha de docentes, estatales y la CTA Provincia, a los trabajadores privados y movimientos sociales; impulsando 4 medidas para tener recursos (ver recuadro). Y marchar el 14 de marzo con la CTA y CGT, hacia otro paro nacional.
Pero también fortalecer un proyecto alternativo al fracaso de los K. Scioli, Massa, Macri o De la Sota se postulan por derecha. Tampoco es alternativa ir a una nueva Alianza con la UCR, Binner y el FAP como promueven sectores del radicalismo y el FAP bonaerense. En vez de «progresista», ese «frente verdadero» implicaría una nueva frustración para los que anhelan un cambio de fondo.
Con Pino Solanas y Alejandro Bodart construimos alternativa en Capital. En provincia, apoyando las luchas y postulando a Vilma Ripoll para diputada. Unidad que es necesario ampliar, convocando a los sectores realmente progresistas del FAP, a compañeros de la CTA, a la izquierda en verdad unitaria, a los luchadores y sectores independientes y a todo el que desee sumar en amplitud y unidad, en base a propuestas de fondo para la provincia y el país.
Cuatro medidas por otro «modelo»
1. Recuperar la coparticipación:
La provincia produce el 37% del PBI del país y tiene el 39% de la población, pero sólo recibe un 19% de coparticipación. Salvo Capital, es la que menos recibe. Perdió 7 puntos desde 1983 y hasta Néstor Kirchner decía que era injusto… Además, el Fondo del Conurbano sigue congelado en 650 millones cuando hoy debería ser de 12.450 millones que van a otros distritos. No sirven las denuncias por «carta» de Scioli ni el reclamo mediático de la «oposición». Para recuperar la coparticipación pérdida y actualizar el Fondo del Conurbano, hay que plantarse y luchar en serio ante Cristina.
2. No pagar la deuda pública:
Por esa pérdida de ingresos y los malos gobiernos como el de Scioli, la Provincia tomó 6 veces más deuda que en los ’90. Hoy debe $ 61.000 millones: 51% a la Nación, 42% en bonos provinciales y 7% a bancos extranjeros. Por capital e intereses se pagan más de 9.000 millones al año. Ante la emergencia social, ¡basta de pagar esa deuda ilegítima!
3. Reforma impositiva progresiva:
El 76% de la recaudación provincial es por Ingresos Brutos (impuesto al consumo que los empresarios trasladan a precios). Así, los impuestazos perjudican a sectores populares y medios. Hay que cobrar fuertes impuestos a los capitalistas concentrados, terratenientes y bancos. Y derogar los Pactos Fiscales I y II.
4. Basta de impuesto al salario y de topes a las asignaciones. Aumento de sueldos, jubilaciones y planes sociales:
Son reclamos a Scioli, pero también a Cristina, impulsando un nuevo paro y plan de lucha CTA-CGT.