Charlamos con Horacio, trabajador despedido y activista de la lucha
Horacio, ¿Cuál fue el conflicto de los Vigiladores del Roca?
Después del asesinato de Mariano Ferreyra, por la presión de las luchas contra la precarización y la tercerización, los 38 compañeros vigiladores que trabajábamos para Hunter (que a su vez era contratada por Herso) logramos entrar al convenio de los ferroviarios. Esto fue un triunfo importante que significaba beneficios que nunca habíamos tenido. Inexplicablemente este año, estos 38 compañeros vigiladores fuimos despedidos por la empresa cuando no se renovó el contrato. En lugar de reubicarnos nos dejaron en la calle.
¿Qué pasos legales han seguido y cómo ven la lucha de acá en más?
En contacto con los abogados de la CTA opositora hemos seguido todos los pasos legales correspondientes. Es una pelea dura pero estamos convencidos que podemos lograrlo. Solo estamos pidiendo nuestros puestos de trabajo. Los 38 exigimos la reinstalación. Para eso le estamos solicitando una entrevista al Ministerio de Trabajo. Hoy, al mismo tiempo, varios de nosotros acompañamos la pelea de los Vigiladores despedidos del Francés y creemos que el camino es el de la lucha en la calle.