Pese al carnero y «militante» llamado de Yasky, Stella Maldo-nado de CTERA y dirigentes como Baradel de SUTEBA para no parar ni el 27 ni el 28 de agosto, el paro docente fue total o tuvo muy fuerte adhesión en las provincias donde lo impulsamos los gremios y agrupamientos de la Federación Nacional Docente (FND en la CTA) como Chaco, Formosa, Misiones, Catamarca y la provincia de Bs. Aires donde llamaron también los SUTEBA disidentes, la FEB y UDOCBA (CGT Moyano). Se hizo sentir en la Ciudad de Bs. Aires, convocado por Ademys. Y tuvo altísima adhesión en donde hay conducciones o tiene peso la oposición Lila-Multicolor de CTERA como en Santa Cruz, Neuquén, Tierra del Fuego, Chubut, Mendoza y Rosario. Además de Jujuy donde llamaron todos los gremios estatales.
El paro fue dispar en Salta y Santiago del Estero donde movilizaron los Docentes Unidos de Salta y CISADEMS de Santiago junto a la CTA, la izquierda y otros sectores. Fue más débil en Tucumán donde ningún gremio convocó. En Córdoba Capital no se paró porque UEPC no consultó y hubo mucha bronca en los docentes porque querían parar. En el interior cordobés hubo mucho ausentismo, apoyado en el paro de transporte. En La Rioja no hubo paro ni medidas autoconvocadas. La AMP de Rogelio De Leonardis y la Violeta (PC) no consultó ni llamó al paro, aunque en algunos colegios faltaron docentes que decidieron parar.
Así, este segundo paro nacional concretado pese a la Celeste de CTERA y los gremios docentes de la CGT de Caló como UDA, AMEP, SADOP o la CEA que no convocaron, tuvo una fuerte adhesión del 60% al 65% en todo el país. Esto implica que más de 600 mil docentes pararon en las provincias y hubo una bronca extendida allí donde no se convocó ni fueron consultados.
Un factor decisivo para que no sea total, fue que se postergara tantas veces desde la CGT y que Moyan le pusiera fecha solo unos días antes, sin preparación. Eso impidió hacer una fuerte campaña en el país para exigir y luego desbordar a las conducciones K de CTERA, la CEA y demás gremios de la CGT Caló.
La bronca por la acuciante situación salarial ante la inflación, por el deterioro en las condiciones de trabajo y la decadencia de la escuela pública pudieron más que la complicidad de las conducciones K y los cabildeos de Moyano o Barrionuevo que juegan para proyectos de «oposición» como Macri, De la Sota o Massa y no quieren derrotar el ajuste sino apretar a Cristina para que haga el trabajo sucio hasta el 2015.
La importante adhesión al paro tonifica a las luchas provinciales, pero no alcanzó a dar un golpe mayor al no lograr quebrar a la burocracia que pone freno a la lucha junto al gobierno de Cristina, gobernadores como Scioli y las patronales que no quieren que se reabran las paritarias salariales ni se incrementen los presupuestos, al servicio de seguir pagando una deuda externa fraudulenta.
La tarea de los luchadores y las conducciones combativas enroladas en la FND y la oposición de CTERA es la de retomar las asambleas de escuela y distrito, llamar a plenarios de delegados y congresos con mandato para apoyar las luchas latentes o en curso. Pronunciarse porque haya continuidad con un nuevo paro, esta vez por 48hs con movilización.
Y exigir, en las entidades de base de CTERA como SUTEBA, que se convoquen a esas instancias democráticas para votar, con mandato de base, esa lucha nacional y provincial. El Plenario Provincial de Delegados de los SUTEBA disidentes, preparado con suficiente anticipación y la mayor consulta en la base, es un espacio decisivo para esta política. En cada distrito debemos buscar el canal para resolver la continuidad de la lucha.
Francisco Torres Mesa de conducción Federación Nacional Docente, CTA