MST - Movimiento Socialista de los Trabajadores Lunes 27 de Agosto, actualizado hace 4 hs.

Bodart contra el paradigma machista: Sofovich, Del Sel y la mujer-objeto

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«Con el mayor respeto por el dolor de los que lo quisieron, o más allá de la valoración de alguna de sus producciones, Gerardo Sofovich representa un emblema cultural que no comparto: machismo y fetichización de las mujeres convertidas en objeto. Por eso me parece grotesco que justo hoy, el Día de la Mujer, se le realice un homenaje en la Legislatura de la Ciudad. Además, Sofovich defendía ideas reaccionarias que lo llevaban a presumir de su amistad con genocidas como Videla o Massera y el indultador Carlos Menem. Lamentable.»

Ésa fue la postura de nuestro diputado Alejandro Bodart el 8 de marzo ante la decisión de las autoridades de la Legislatura porteña de homenajear a Sofovich, fallecido ese día, realizando allí su velatorio. Como bien lo explicó en numerosos reportajes en radio y TV, Bodart reconoció el pleno derecho de los parientes y amigos de Sofovich a recordarlo. Su oposición fue a homenajearlo en un ámbito público y plural como debe ser la Legislatura, ya que la figura de Sofovich no es representativa del conjunto.
Bodart cuestionó el estereotipo de mujer-objeto que Sofovich divulgó por décadas y que contribuye a naturalizar la subordinación de la mujer y por ende la violencia de género. ¿O acaso alguien cree que los valores y mensajes transmitidos por los medios masivos no tienen ninguna influencia en las conductas sociales? No hace falta ser de izquierda o feminista para compartir esta realidad.
En sus programas Sofovich siempre se mostró rodeado de secretarias con poca ropa, blanco de sus miradas lascivas y nalgadas. Como un Tinelli anticuado, defendió que estaba bien mostrar culos y tetas. Pero nadie puede engañarse: difundir una y otra vez que la mujer es un objeto sexual propiedad del hombre, de hecho es habilitar a castigarla si no responde a los deseos del «propietario». Así lo reconoce incluso la Ley 26.485 de Protección Integral a las Mujeres al definir la violencia simbólica y mediática.(1) Bodart también criticó los antecedentes antidemocrá-ticos de Sofovich. Se jactaba de ser amigo de los genocidas Videla, Massera y Viola. En el ’77, lo nombraron en Canal 7 y luego en el 9. En el ’79, su película Las muñecas que hacen pum fue una alegoría justificatoria del gobierno militar. Años después Sofovich diría que «no sabía lo que pasaba» bajo la dictadura y fue gran amigo de Menem, que lo nombró gerente en ATC, donde tuvo una pésima gestión.

Del Sel y las putas

El cómico Miguel Del Sel, candidato macrista a gobernar Santa Fe, es otro personaje conocido por su chabacanería y su constante utilización de la mujer como objeto sexual. Su grosería más reciente no fue en un espectáculo o una frase suelta, sino en un spot electoral. O sea que la vio y resolvió dejarla tal cual.
En el spot, tras prometerle un asado a algunos trabajadores, uno le dice a Del Sel que traiga la parrilla y entonces éste le responde: «¿Qué querés, que venga con putas encima también?»
El escándalo incluyó críticas de periodistas. Pero en vez de pedir disculpas, Del Sel los fustigó: «Caraduras. No hacen nada por la gente. Están pagos…»
La respuesta de la Asociación de Prensa de Santa Fe y el Sindicato de Prensa de Rosario fue muy clara: «Es inaceptable que una crítica sea motivo para una descalificación y acusación generalizada al conjunto de los trabajadores de prensa. Compartimos las críticas efectuadas por los colegas hacia su video de campaña, ya que la expresión ‘llevar putas’ no puede interpretarse más que como estigmatizante y cosificadora hacia la mujer: es violencia de género disfrazada de humor.»

Una batalla política y cultural

El planteo de Bodart tuvo una fuerte repercusión. La actriz Malena Pichot, por ejemplo, tuiteó: «Maravilloso y valiente lo de Alejandro Bodart blanqueando en Intratables la histórica misoginia que implantó Sofovich en nuestra cultura». Muchas y muchos compartieron una valoración positiva; a otros les pareció muy audaz.
Lo cierto es que nuestro diputado tuvo el mérito de poner sobre el tapete que, junto a seguir dando una lucha política contra toda desvalorización de la mujer y en defensa de sus derechos, hace falta también una batalla permanente por un nuevo modelo cultural que sea no machista e igualitario.

                            Pablo Vasco

(1) «Art. 5º (tipos de violencia) inciso 5. Simbólica: La que a través de patrones estereotipados, mensajes, valores, íconos o signos transmita y reproduzca dominación, desigualdad y discriminación en las relaciones sociales, naturalizando la subordinación de la mujer en la sociedad.
«Art. 6º (modalidades o ámbitos) inciso f. Violencia mediática contra las mujeres: aquella publicación o difusión de mensajes e imágenes estereotipados a través de cualquier medio masivo de comunicación, que de manera directa o indirecta promueva la explotación de mujeres o sus imágenes, injurie, difame, discrimine, deshonre, humille o atente contra la dignidad de las mujeres, como así también la utilización de mujeres, adolescentes y niñas en mensajes e imágenes pornográficas, legitimando la desigualdad de trato o construya patrones socioculturales reproductores de la desigualdad o generadores de violencia contra las mujeres.»

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